Rosa María Salcedo

Alas de Papel-Casita de veranoLa Asociación AFAND “ Alas de Papel ”, dirigida a personas con discapacidad psíquica y física, está desarrollando un verano lleno de actividades, en las cuales se busca potenciar habilidades sociales, además de realizar clases de fisioterapia, logopedia, informática y apoyo escolar. Radio Horizonte ha hablado con la presidenta de esta asociación, Catalina Serrano de la Cruz, para comentarnos como es la dinámica de grupo “las clases se realizan días alternos y son individuales, para que cada niño pueda progresar en los aspectos que más necesita”. En esta línea, Serrano de la Cruz explica que “ninguna discapacidad es igual por lo que cada profesional trabaja con el niño según las necesidades de cada uno”.

La sobresaliente labor que realiza esta institución a lo largo de todo el año, se potencia en época veraniega con el grupo de voluntariado, del que su coordinadora, Virginia Sánchez comenta que está compuesto por siete voluntarios, la mayoría con titulación. De esta forma, pretenden, además de trabajar la parte de ocio que es muy importante para ellos, ocuparse de “aspectos como las relaciones sociales e interaccionar con el mundo físico”. Debido a la heterogeneidad del grupo y que algunos niños son muy pequeños, se llevan a cabo talleres más específicos, con el único fin de que todos sean partícipes. Dentro de estos talleres podemos encontrar actividades multi-sensoriales, en las que se trabajan aspectos como la forma de comunicarse con el resto, la creatividad o el aprendizaje individual, y actividades de musicoterapia, realizadas con música para el desarrollo de los sentidos. El objetivo “es que los chicos salgan a la calle y aprendan por ellos mismos, sin necesidad de recurrir a otra persona”-dice. Por otra parte, Sánchez admite que el tiempo de realización de cada labor “va en función de lo que requiera la actividad y el niño”.

Grupo de autogestores para adolescentes

Es un hecho que desde Alas de Papel se ocupan del desarrollo social de las personas, por lo que también han creado el grupo de autogestores, dirigido a chicos más adultos, con el objetivo de fomentar las relaciones sociales. La organizadora de esta agrupación, María José Muñoz, comenta que “es de reciente creación, pues nació hace aproximadamente un año, al observar que a medida que los chicos van creciendo surgen otras necesidades más adultas”. Muñoz, aclara que este conjunto, que está integrada por 9 chicos mayores de edad, “es como un grupo de amigos en el que ellos plantean y proponen soluciones a sus problemas, lo que además también ayuda a establecer confianza entre ellos”.

Cabe destacar que tanto el grupo de voluntariado como el de autogestores actúan de forma altruista, buscando siempre la motivación de los niños y jóvenes. En este sentido, Sánchez confirma que “por suerte podemos realizar la mayoría de las actividades que se programan”.