Veronica Reolid Losa

Verónica Reolid Losa. Dietista-Nutricionista
de la Asoc. de Celiacos de CLM

La enfermedad celíaca tiene en el 100% de los casos, un componente genético. La persona celíaca nace ya con esta predisposición, y puede desarrollar la enfermedad en cualquier edad de su vida. Hay un alto porcentaje de padecerla en los primeros años de vida, pero puede que la enfermedad aparezca en la adolescencia, en la edad adulta, e incluso en edades mucho más avanzadas de la persona. El celíaco puede igualmente, pasar su enfermedad a sus descendientes, y que éstos la porten y desarrollen, o que solamente la porten a sus descendientes, o directamente no la hayan heredado. Esto dependerá de cada individuo. Hoy en día, nos sorprende la cantidad de personas que siguen a cabo una dieta sin gluten, sin ser celiacas; simplemente por decisiones propias. Y es necesario hacer saber, que un celíaco, debe seguir su dieta para no estar enfermo, puesto que su calidad de vida dependerá enormemente de su alimentación exenta de gluten. No es un capricho, ni una dieta de moda, es una DIETA POR NECESIDAD.

Los síntomas que la persona celiaca manifiesta si no hace la dieta de forma correcta, parten todos de la intolerancia a la proteína gluten de los cereales: trigo, avena, cebada y centeno. El gluten provoca una lesión de las vellosidades del intestino delgado, las cuales se autodestruyen y provocan que el intestino quede totalmente plano. Ello deriva en la nula absorción de nutrientes, con lo cual el primer síntoma es la desnutrición, acompañado de dolor gastrointestinal, diarreas, malestar generalizado, dermatitis y déficit enfermedad-celiacade nutrientes. Por ello, la anemia es una de las primeras señales de alarma; en los niños, además se manifiesta en un carácter apático, tripa abultada y van muy por debajo de su percentil de crecimiento.

Afortunadamente cuando se detecta la intolerancia y se inicia la dieta sin gluten, de forma automática las vellosidades del intestino se regeneran de nuevo y el organismo vuelve a absorber los nutrientes necesarios. La dieta deberá ser EXENTA de gluten, SIN NINGÚN TIPO DE TRANSGRESIONES, Y DE POR VIDA.

No hay medicamentos ni pastillas milagrosas para curar, paliar o poder tomar gluten de forma ocasional. Dependerá de su alimentación, que el celíaco pueda estar completamente sano.

“Que el alimento sea tu medicina, y que tu medicina sea tu alimento”. HIPÓCRATES, Siglo V a.C.