Un grupo de vecinos de Pozuelo de Alarcón amantes de la música coral decidieron hace cuarenta y un años formar un coro que comenzó como una actividad cultural en el edifico del Foro de Pozuelo, corría el año 1983. A los pocos meses, por problemas internos, este grupo se dividió naciendo la Coral Kantorei. Con una nueva directora al frente, Cristina Bertullo, profesora del Conservatorio de Música Elemental que había antes en Pozuelo, la coral se fue consolidando presentándose al año siguiente, por primera vez, al Certamen Internacional de Habaneras y Polifonía de Torrevieja y alzándose con el primer premio. “Nuestra primera directora, que estuvo con nosotros siete años, era uruguaya y tenía un ritmo muy especial dándole a la habanera un aire único que encantaba a todo el mundo. De hecho, tenemos un disco de vinilo de habaneras”, cuenta una de las coralistas de Kantorei que lleva en la formación desde 1984 y que continúa actualmente.
Muchos han sido los galardones y premios que ha obtenido la Coral Kantorei a lo largo de su trayectoria además de actuaciones espectaculares en distintos teatros e iglesias tanto a nivel nacional como internacional. Recuerdan que “una de las grandes obras que hicimos con Cristina fue la Misa Criolla. Conseguimos que su compositor, Ariel Ramírez viniera con sus músicos y la cantamos en el Teatro Manuel Falla de Granada. Fue un éxito total. También la cantamos en París”.
Al salir del Foro de Pozuelo, estuvieron una temporada utilizando las instalaciones del colegio Kensington School y de allí han pasado por distintos locales cedidos por el ayuntamiento, aunque la mayoría de los años y donde siguen actualmente ensayando los martes y jueves de ocho de la tarde a diez de la noche, es en el Centro Municipal de Mayores Prados de Torrejón.
En el año 2000, entra en escena un nuevo y polifacético director, Pedro Nebreda, que ha estado con la coral durante veintitrés años, jubilándose el pasado año. Con él comienza una nueva etapa en Kantorei. “Con Pedro comenzamos a dar conciertos de grandes obras, era un director muy atrevido y siempre mantenía al coro arriba. Empezamos con Carmina Burana, una obra de prestigio que nos motivaba muchísimo, también hicimos Zarzuela, la verdad es que fue otra etapa muy fructífera de conciertos porque Pedro era un director que tenía muchísimos conocimientos. Todos los años tenemos un gran concierto en el teatro MIRA de Pozuelo, apunta la presidenta actual de Kantorei.
La coral Kantorei perteneció durante unos años al Patronato de Cultura de Pozuelo. Por aquel tiempo, el ayuntamiento de la localidad con José Martín Crespo al frente, tenía muchas actividades con otras ciudades europeas facilitando así los viajes de Kantorei representando a Pozuelo de Alarcón. “Es fundamental para una actividad de este tipo tener un apoyo institucional porque si no, estás muy limitado. Martín Crespo era muy aficionado, de hecho, en uno de los viajes que hicimos a San Vicente de la Barquera, se vino con nosotros en el autobús”, recuerdan.
Pero ¿cómo se financia actualmente la Coral Kantorei? “Cada coralista pagamos una cuota mensual porque si no, no nos mantenemos y esa cuota no cubre casi ni el salario del director. Hasta ahora, hemos estado contando con subvenciones del Ayuntamiento. Aún así, los recursos son limitados y condicionan los posibles proyectos que podamos tener. En el año 1996, nos dijeron desde las instituciones que teníamos que dejar el Patronato de Cultura y constituirnos como asociación. Fue un momento muy duro para la coral porque tuvimos que subvencionarnos nosotros, aunque nos dijeron que podíamos contar con una hipotética potencial ayuda del ayuntamiento en función de sus presupuestos. Nosotros seguimos presentándonos en todos los sitios como el coro de Pozuelo de Alarcón incluso en los carteles que producimos nosotros está el logo del ayuntamiento. Nuestro objetivo ahora es darnos a conocer más, promocionarnos. Nuestras relaciones con las instituciones son buenas, y les hacemos partícipes de nuestros proyectos, con la esperanza de conseguir un mayor apoyo. Ahora mismo hay un interés dentro del coro, de todas las personas que lo componemos, por hacer cosas.”, nos confirman miembros del coro.
La coral Kantorei es una gran familia. Recuerdan que “íbamos muchas parejas a ensayar con nuestros niños, los pequeños hacían los deberes mientras nosotros ensayábamos. Esos niños se hicieron mayores y se quedaron en la coral. Ha habido épocas que hemos estado familias enteras cantando y viajando. El ambiente que tenemos es muy cordial, acogemos con mucho cariño a la gente. Este año se han incorporado cuatro nuevos coralistas y animamos a que vengan más. No hace falta que tengas una voz fantástica porque lo importante de un coro es el empaste, tu voz se tiene que adaptar a las que tienes alrededor para que hagan un unísono. Conocimiento musical tampoco es imprescindible, porque nosotros hemos establecido un sistema de trabajo a través de unas herramientas que hemos elaborado para ayudar a la gente a incorporarse y a cantar. Sólo hace falta que te guste cantar, que tengas oído y que no desafines demasiado (risas)”.
Ahora con el nuevo director, Juan Carlos Zamudio, un joven mexicano, la Coral Kantorei está muy ilusionada. “El alma de un coro siempre es el director y la Coral Kantorei ha ido acorde, obviamente, con su dirección” afirma la presidenta de Kantorei. Actualmente están ensayando nuevo repertorio de cara a la Navidad que podremos disfrutar los días 13 de diciembre en la parroquia de la Anunciación, el 15 del mismo mes en la parroquia del Carmen y el día 20 de diciembre en la iglesia de Santa María de Caná.
Aunque los recursos financieros de la Coral Kantorei son los que son, siguen trabajando para el futuro, mantener el excelente nivel de sus voces, su repertorio y el trabajo del director es fundamental, a la vez que buscan patrocinadores. Una coral que sigue viva, gracias a su esfuerzo, dedicación y amor por el canto. La Coral Kantorei tiene trayectoria para largo, gracias a los pozueleros que la componen.
Texto: Kathy Montero Fotos: Cedidas por el coro
