Cuidando la integración laboral y el amor por las plantas

Tanto las plantas ornamentales del Vivero de la Asociación la Veguilla como las personas tan especiales que cuidan de ellas, son las protagonistas de nuestro reportaje de este mes. Han pasado ya 38 años desde que D. José Alberto Torres Garduño, fallecido en octubre de 2017, iniciara como Secretario General de la Fundación Promiva y de la Asociación La Veguilla este proyecto para promover la inserción socio-laboral de un grupo de estudiantes de educación especial que terminaban su ciclo escolar.

José Luis Hidalgo, gerente de la Fundación Promiva, nos cuenta que la Asociación La Veguilla “se constituye el 15 de abril de 1982, siendo declarada de Utilidad Pública en 1999. Es una iniciativa de un grupo de padres de alumnos del Colegio de Educación Especial Virgen de Lourdes quienes, viendo que sus hijos estaban próximos a concluir la etapa escolar y preocupados por su porvenir, aúnan esfuerzos para constituir la Asociación” con el objeto social de atender “las necesidades físicas e intelectuales sin ningún ánimo de lucro, en favor especialmente de las personas con algún tipo de discapacidad psíquica o intelectual”, y precisamente una necesidad esencial era y es “facilitar y promover la inserción socio-laboral de este colectivo que se encuentra en una situación de especial vulnerabilidad”.

Parte de las instalaciones de La Veguilla hace unos años con personal y usuarios.

La Veguilla es el segundo Centro Especial de Empleo más antiguo de la Comunidad de Madrid en el que equipos multiprofesionales apoyan la incorporación, desarrollo y permanencia de aquellos trabajadores que por su tipo de discapacidad puedan precisarlo. “No solo nos centramos en el aspecto productivo, cuestión ésta muy importante de cara a garantizar la continuidad de la actividad y la salvaguarda de los puestos de trabajo, sino también y de modo muy especial, en el desarrollo íntegro de la persona, fomentando su autonomía y las aptitudes personales que permitan su feliz desarrollo vital”, comenta el señor Hidalgo.

La finca en la que se encuentra situada el vivero tiene una extensión de aproximadamente 10 hectáreas de las que 2,5 se dedican al cultivo de planta bajo cubierta o en invernadero. Se trata de instalaciones con avanzados sistemas de fertirrigación en las que se cultivan distintas variedades de planta ornamental, como petunias, geranios, verbenas, aromáticas, etc. Visitar el vivero en esta época es disfrutar de una explosión de colores y olores con todas sus plantas en plena floración.

La Fundación cuenta además con un laboratorio biotecnológico, único en toda España, pues forma y emplea a personas con discapacidad intelectual como Técnicos Auxiliares de Laboratorio. “Actualmente, el Laboratorio está ampliando el programa formativo, denominado “Labcoat”, mediante el que se forma a personas con discapacidad intelectual para adquirir las competencias que les permitan trabajar como Técnicos Auxiliares de Laboratorio”, nos cuenta Hidalgo.

Izq.: Flores. Dcha.: Primer invernadero (de cristal) del vivero.

Por otro lado, el papel de la residencia es muy importante. En un edificio situado dentro del Vivero, con un entorno privilegiado en plena naturaleza, conviven todo el año30 residentes, que trabajan en el vivero o atienden el centro ocupacional, favoreciendo así las relaciones interpersonales. Existe un plan de ampliación de la residencia para satisfacer la demanda de muchas familias que llevan tiempo buscando un lugar adecuado para sus hijos.

Trabajar con estas personas tan especiales, nos cuenta Hidalgo, “es una relación que trasciende el ámbito estrictamente laboral en el que ambas partes se retroalimentan y donde ambas acaban recibiendo mucho más de lo que dan”. En la actualidad, el vivero cuenta con una plantilla de 94 trabajadores de los que 65 son personas con discapacidad psíquica y se está desarrollando un programa de voluntariado que está en su fase inicial, para dar cabida a una mayor participación de la sociedad civil de Boadilla en el día a día de la Veguilla. Cualquier persona interesada en apoyar esta iniciativa social es bienvenida.

Izq.: Puertas del laboratorio biotecnológico -único en España-. Centro: Residencia. Dcha.: Invernaderos actuales.

Texto: Ayer&hoy
Fotos: Ayer&hoy y Vivero La Veguilla