La Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha ha confirmado este lunes que el brote de legionela “está controlado” como demuestra la disminución del número de casos de legionelosis vinculados a Manzanares, hasta tal punto que sólo ha habido dos nuevos diagnosticados en las últimas veinticuatro horas. El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, que ha comparecido ante los medios de comunicación esta mañana junto al alcalde de Manzanares, Julián Nieva, el director general de Salud Pública regional, Manuel Tordera, y el gerente del Área Integrada, Pablo Aguado, ha expresado que “esperamos que vayamos cerrando el brote” en los próximos días.
El número de afectados por legionela ha ascendido ya hasta los 222 casos y en estos momentos sólo hay 27 ingresados, 5 de ellos en Unidades de Cuidado Intensivo de la provincia, tres en el Hospital General de Ciudad Real y dos en el Hospital La Mancha Centro de Alcázar de San Juan. El consejero de Sanidad ha señalado que tres personas están “mejorando” y dos están “estables dentro de la gravedad”. El número de víctimas mortales no ha aumentado; de manera que este brote de legionela que lamentablemente ha causado dos fallecidos ha presentado una mortalidad muy por debajo de la habitual, que ronda entre el 5 y el 10 por ciento, mientras que en Manzanares ha llegado a menos del 1 por ciento.
Con respecto al foco de contaminación, Jesús Fernández Sanz ha afirmado que esperan tener “más información” esta semana una vez recibidos los datos epidemiológicos de la Universidad de Valencia, que pretenden recibir este martes o el miércoles. Ahora bien, el responsable de Sanidad ha destacado que la “hipótesis” principal es que haya sido la fuente ornamental aledaña a la Estación de Autobuses, ya que los análisis han mostrado una “colonización elevada” de la bacteria en esta instalación y porque según ha explicado acompañado de un gráfico “ha habido una zona caliente de casos de legionelosis en esta zona de la localidad”. Tras señalar que la colonización de la torre de refrigeración que también ha dado positivo en legionela ha sido “más baja”, Fernández Sanz ha explicado que el germen “se puede desarrollar en aguas estancadas y superficiales de fuentes ornamentales en cualquier momento por motivos varios”.
Aunque en más del 50 por ciento de los brotes de legionela nunca se llega a saber el foco, el consejero de Sanidad ha confiado en “conocer el origen”; y además ha expresado que esta enfermedad que ha tenido en vilo a la población manzanareña durante días“está llegando a su fin en un tiempo récord”, pues en otros casos como el registrado en Alcalá de Henares su control tardó dos meses.
El consejero de Sanidad también ha realizado una secuencia cronológica desde la declaración de los dos primeros casos de legionelosis el pasado día 11 de diciembre, a las tres de la tarde, en el Hospital Virgen de Altagracia de Manzanares; hasta la aplicación del protocolo de actuación entre hospitales y centros de salud, y la coordinación a través del control epidemiológico en Ciudad Real. Los días 12 y 13 de diciembre empezó la extracción de muestras en las torres de refrigeración, la limpieza y la desinfección; y el día 14 ya se habían obtenido 33 muestras de 103 puntos susceptibles de transmitir la legionela, cifra que ascendió hasta 140 según confirmó la semana pasada Manuel Tordera en rueda de prensa. Las únicas muestras que dieron positivo fueron dos: la de una torre de refrigeración de una fábrica del polígono industrial y otra de una fuente ornamental cercana a la Estación de Autobuses; aunque técnicos de Salud Pública sellaron todos los posibles focos.
En cuanto al número de casos, el fin de semana entre el 15 y el 18 de diciembre fue el más intenso, con el registro de un mayor número de personas afectadas y de más individuos que comenzaron con los síntomas. El noventa por ciento de los casos detectados han sido de Manzanares, y entre el resto, ha habido siete de Membrilla, dos de Alcázar de San Juan, dos de La Solana, dos de Villarta de San Juan, uno de Las Labores, uno de Villafranca, uno de Campo de Criptana, uno de Moral de Calatrava, uno de Tomelloso, uno de Torralba de Calatrava y uno de Daimiel.
Tras destacar la labor de los profesionales sanitarios de la zona y de todas las personas implicadas en controlar la situación, el consejero también ha reiterado que “la bacteria de la legionela no se puede contagiar de persona a persona” y sólo “mediante aerosoles o vapores a través de la inhalación directa”.