Hacía apenas tres años que YouTube había echado a andar y comenzaba a convertirse en una plataforma de consumo habitual. Borja Pérez se convirtió en el padre de las webseries, series de ficción formadas por capítulos de corta duración que se compartían a través de plataformas como esta. Sus inicios en la interpretación se remontan al videoblog “Qué vida más triste”, donde Borja encarnaba a un perdedor que trabajaba como gruista y aún vivía con sus padres. La serie surgió como un hobby y empezó a ser colgada en la red, llegando a alcanzar más de dos millones de visitas diarias. Tal éxito propició que La Sexta trasladara el formato a la televisión en forma de capítulos de entre 20 y 25 minutos de duración permaneciendo durante cuatro temporadas. El personaje interpretado por Borja Pérez era el de un pícaro espontáneo y chistoso aficionado a los videojuegos que fracasaba cada vez que emprendía uno de sus delirantes proyectos o intentaba ligar con una chica. Son características su expresiones como “toma, toma”, “flipa, flipa”, “locurón, locurón” o “ya está, la liada padre”. Borja intervino como actor secundario en los largometrajes como Pagafantas (2008) y No controles (2010). Desde 2012 hasta 2015 editaba cada semana vídeotutoriales analizando los más recientes videojuegos. En abril de 2015, Atresplayer estrena Basauri Mirror, una serie donde Borja Pérez mostraba las situaciones más absurdas de la vida. Desde 2019, Borja se ha alejado de su etapa como actor y se ha centrado en su familia y su trabajo en la grúa.