Álvaro Feijóo López / Coordinador de campamentos

En verano podemos encontrar todo tipo de campamentos: deportivos, de inmersión lingüística, urbanos, de aventura, en la montaña, etc. Cualquiera de ellos supone una experiencia emocionante y enriquecedora para los niños de diferentes etapas.

Los campamentos de verano pueden proporcionar muchos beneficios. Desde el desarrollo de habilidades sociales hasta el fomento de la independencia y de nuevas experiencias.

Beneficios
1. Desarrollo de habilidades sociales. La comunicación y el trabajo en equipo ayudan a que eso sea posible. Los campamentos de verano permiten a los niños interactuar con otros de diferentes edades y procedencias.
2. Aumento de la confianza. Los campamentos ofrecen diferentes actividades que pueden desafiar a los niños y animarlos a superar sus miedos y limitaciones.
3. Fomento de la independencia. Los campamentos de verano brindan también a los pequeños la oportunidad de tomar decisiones como qué actividades desean realizar.
4. Nuevas experiencias. Los niños tienen acceso a actividades y experiencias que, de otro modo, no podrían hacer como senderismo, kayak, escalada u otros deportes al aire libre.
5. Habilidades prácticas. A través de estas experiencias, los alumnos también pueden aprender habilidades específicas como jardinería, cocina, carpintería, etc.
6. Salud física y mental. Los campamentos pueden ser una forma divertida de fomentar la actividad física y reducir el tiempo que los niños dedican a las pantallas o los dispositivos electrónicos. Además, es evidente el aporte a la salud mental que tienen estas actividades.
7. Recuerdos duraderos. A través de este tipo de vivencias, los niños guardan importantes recuerdos y hacen nuevos amigos.

Qué tener en cuenta
Encontrar un campamento de verano idóneo para nuestros hijos puede ser una tarea difícil y un desafío para los padres.
1. Debemos tener en cuenta que el campamento de verano escogido se ajuste a los intereses y habilidades de nuestros hijos. Es importante que disfruten y se lleven un grato recuerdo.
2. Es importante también tener presente la edad y madurez de nuestros hijos.
3. Debemos asegurarnos de que el campamento elegido cuenta con medidas de seguridad y supervisión adecuadas que garanticen el bienestar de nuestros hijos. Eso incluye contar con personal capacitado y cualificado.
4. Por último, se recomienda investigar las referencias de otros padres y familias que ya hayan participado en el campamento.

Conectar con la naturaleza
Aunque hay muchos tipos de campamentos, el verano es una oportunidad única para conectar con la naturaleza a la que, por desgracia, muchos niños no están acostumbrados en su día a día. La cotidianidad actual hace que los niños olviden cosas fundamentales como puede ser divertirse conociendo entornos nuevos, animales, plantas…

A su vez, es una ocasión para dejar de lado la tecnología e Internet. El tiempo con pantallas se ha convertido en un problema y durante los campamentos de verano, los niños conectan otra vez con hacer deporte, jugar con sus amigos, al aire libre o comunicarse cara a cara con sus compañeros.