Aurelio Maroto
Y van ocho. El Caminillo de Santiago, organizado por la Hermandad del Apóstol, celebró su octava edición en una soleada y agradable mañana de mayo. Un total de 75 niños y niñas de los colegios San Luis Gonzaga, Romero Peña, Sagrado Corazón y Javier Paulino se unieron a esta particular peregrinación. Salieron desde el colegio San Luis Gonzaga y pasaron por la Casa de la Encomienda y el Palacio Don Diego, para finalizar en la ermita de San Sebastián, donde abrazaron al Patrono como culminación natural del peregrinaje.
Durante las paradas, el secretario de la Hermandad, Paulino Sánchez, dio explicaciones históricas sobre cada enclave y el párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, también reflexionó sobre el sentido del Camino de Santiago y la figura del Apóstol. Entre tanto, los directivos de la hermandad repartieron pines y pulseras, además de atender la cumplimentación de la Compostelana, como acreditación de haber completado el Caminillo. La imagen de Santiago Peregrino había sido trasladada expresamente a la ermita desde su ubicación habitual en Santa Catalina, cerrada por obras.
El secretario de la hermandad, José Díaz-Cano, expresó su gratitud a los colegios y a sus profesores de religión por haber colaborado atrayendo a los niños. “Es una forma de explicarles la peregrinación y el Apóstol es quien mejor les puede motivar para peregrinar en los estudios o en la vida”, declaró.
Díaz-Cano avanzó que están teniendo reuniones con la parroquia para estudiar de qué forma pueden ayudar en sus obras de reforma, “siempre dentro de nuestras limitadas posibilidades como hermandad”, aclaró. Por otra parte, recordó que la próxima gran cita será el 25 de julio, día de Santiago, que pronto comenzarán a organizar.
