Gabriel Jaime
El tradicional Ofrecimiento a Nuestro Padre Jesús Rescatado recogió la cantidad final de 13.325 euros, ochenta más que el año pasado, en una jornada veraniega y con mucho ambiente que se prolongó hasta la media noche del domingo.
Los cultos comenzaron en la tarde del sábado con el primer día del novenario, que se prolongará hasta el domingo siguiente, continuando en la mañana la habitual diana de la banda de cornetas y tambores de la cofradía, en la mañana del ofrecimiento.
A las doce y media de la mañana se celebró en la parroquia de San Juan Bautista de la Concepción la función religiosa, que ofició el párroco Manuel Infante, quien en su homilía tuvo un recuerdo especial para las bodas de oro de la banda de la cofradía.
En el ofertorio fueron presentadas flores, el estandarte de la cofradía, un instrumento de la banda y el pan y el vino de la consagración.
La parte musical corría a cargo del coro de la parroquia, que al finalizar la misa entonó el Himno a Jesús Rescatado. En lugares preferentes del templo se encontraban concejales de los grupos socialista y popular, encabezados por el alcalde Luis Díaz Cacho, así como representantes de cofradías y hermandades.
Finalizada la misa la imagen era sacada al pórtico del templo, comenzando el ofrecimiento que abría el alcalde Luis Díaz Cacho, continuando el mismo los fieles presentes.
El presidente de la Cofradía de la Esclavitud de Jesús Rescatado, Antonio Mateos-Aparicio, se mostró muy contento al finalizar la jornada. La cantidad recaudada de 13.325 euros es un empujón muy importante para la economía de la entidad, aunque de momento, no hay ningún proyecto determinado. El dinero servirá para hacer algunos retoques en diversos enseres, indicando el presidente que también enviarán un donativo a los damnificados por el terremoto en Nepal. También se reservará algo de dinero para las actividades previstas con motivo del 300 aniversario de la Cofradía y la confraternización trinitaria de hermandades y cofradías trinitarias de toda España que se celebrarán el año próximo.
Sobre la jornada del Ofrecimiento, indicó que comenzó algo flojo, aunque mejoró notablemente a última hora cuando sacaron los objetos que obtuvieron una mayor cuantía económica. La llave alcanzó los 550 euros y el banderín con el que se cerró el ofrecimiento llegó a los 450 euros, además de algunos cuadros con la imagen del titular por los que se pagaron entre 120 y 150 euros. No faltaron los dulces típicos, los suspiros, las roscas de almendras y otros productos gastronómicos como los jamones y quesos.
El presidente agradeció al pueblo en general por su colaboración que ha permitido aumentar ligeramente la recaudación del año pasado, destacando la gente que fue depositando sus donativos a lo largo día.
