Ángel Luis María Cuesta / Jefe de estudios Casvi Boadilla

El Bachillerato Internacional es una metodología mundialmente reconocida gracias a su excelencia. El perfil de la comunidad de aprendizaje del IB es la expresión de un amplio abanico de capacidades y responsabilidades humanas que van más allá del éxito académico.

El principal objetivo de esta metodología es formar personas con mentalidad internacional que sean conscientes del mundo que les rodea. Ofrece a niños y jóvenes ventajas innegables desarrollando sus habilidades de pensamiento crítico, estimulando su curiosidad y fomentando su capacidad de resolver problemas complejos.

Todos los programas que forman parte del Bachillerato Internacional tienen por objetivo que los alumnos se desarrollen a nivel académico y personal.

Se trata de un tipo de educación centrada en los alumnos y desarrolla nuevos enfoques de enseñanza y aprendizaje eficaces. Además, es una metodología que tiene lugar en un contexto global. Así, contribuimos a que los estudiantes tengan acceso y lleguen a comprender diferentes lenguas y culturas.

Este tipo de enseñanza explora contenidos significativos que desarrollan una comprensión disciplinaria e interdisciplinaria que cumple con estándares internacionales rigurosos.

El propósito del Bachillerato Internacional es transformar a los alumnos y también a los centros en cuanto a su método de aprendizaje mediante la indagación, la acción y la reflexión. Los profesores, por su parte, tienen como deber apoyar y potenciar las capacidades de los alumnos. De este modo, los alumnos consiguen explorar y construir sus propias identidades personales y culturales.

Alumnos IB.- La metodología IB es muy diferente a otros métodos de aprendizaje porque anima a los niños a pensar de forma crítica y a cuestionar lo que se les dice. Se les estimula para que examinen tanto el entorno local como el internacional. Por otro lado, tiene la capacidad de adoptar las mejores prácticas procedentes de una amplia variedad de marcos educativos y currículos de diferentes países.

Además de los atributos del perfil, los alumnos desarrollan las habilidades de los enfoques del aprendizaje. Aprenden a ser los responsables de su propio aprendizaje y a comprender cómo se construye el conocimiento.

Los programas del IB incitan a los alumnos a plantear preguntas complejas e interesantes, pensar de forma crítica, aprender de una forma interdisciplinar y desarrollar habilidades de investigación.

Algo que también es muy importante es que la metodología anima a los alumnos a participar de forma activa en sus comunidades. Por ello, centros como nuestro colegio concertado Casvi Boadilla, organiza diversas actividades deportivas, solidarias o formativas en las que participan de forma activa tanto alumnos como familias.

Cada uno de los programas del IB se compromete con el desarrollo del perfil de la comunidad de aprendizaje del IB en los alumnos. Su objetivo es formar alumnos que sean indagadores, informados e instruidos, pensadores, buenos comunicadores, íntegros, de mentalidad abierta, solidarios, audaces, equilibrados y reflexivos.

La importancia de la inclusión en el Bachillerato Internacional.- La inclusión es un proceso que tiene por objetivo aumentar el acceso de todos los alumnos y su participación en el aprendizaje mediante la identificación y la eliminación de barreras a la hora de aprender. Esto supone una serie de cambios y la facilitación de una cultura de colaboración, respeto mutuo y resolución de problemas. Se trata de un enfoque educativo al que todos los colegios deben aspirar.

Inclusión y Bachillerato Internacional son dos conceptos que van siempre de la mano. Los docentes tienen que asegurarse de facilitar a cada alumno una enseñanza y un aprendizaje adaptados a sus necesidades particulares.

Aunque el IB cuenta con diferentes programas, lo ideal, según los expertos, es comenzar desde los tres años. Incluso antes de que pueda dar comienzo el primer programa, PEP, los alumnos pueden preparar su mentalidad y actitud frente a los futuros cursos.