Irene Valverde García / Entrenadora y responsable de prensa del Fénix Basket Club

Juguemos al Basket celebra el mes de la mujer por todo lo alto, conociendo los inicios del baloncesto femenino. De partidos universitarios, a selecciones nacionales; de melocotones a balones.
El baloncesto femenino nace en Estados Unidos, en el Smith College de Northampton el 21 de marzo de 1893 donde la profesora de educación física, Senda Berenson, introduce este deporte en una universidad privada femenina con unas normas concretas. La pista se dividía en tres zonas, con 6 jugadoras por equipo, el balón debía avanzar con bote o pase a través de la pista, con la limitación de tres botes por jugadora, debiendo anotar en cestas de melocotones y empleando balones de fútbol.

El primer partido de equipos universitarios femeninos se jugó en 1896, y es en 1889 cuando se crea el Women’s Basket Ball Rules Commitee en la Conference of Physical Education, con el objetivo de crear reglas uniformes y directrices referentes al juego que se empezaba a endurecer.

El baloncesto femenino se va haciendo cada vez más popular y el 22 de febrero de 1975, 11.969 personas asisten al Madison Square Garden para ver el partido que enfrentaba a Inmaculata contra Queens College.

En 1921 arranca el viaje por la historia del baloncesto femenino en España, en tiempos del Padre Millán y sus partidos en el colegio Sant Antoni de Barcelona, ciudad en la que nació el Club Femení d’Esports, primera entidad deportiva integrada exclusivamente por mujeres.

En los años 80 en España se buscaba cambiar el baloncesto femenino, dar un salto cualitativo para competir en los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992. Se forma un equipo de jóvenes jugadoras altas, en excelentes condiciones físico-técnicas y que procedían de zonas donde no se explotaba el baloncesto en su máximo nivel. Dio comienzo así la Operación Siglo XXI.

Siete jugadoras de los inicios de Siglo XXI se integraron en el proyecto olímpico y todas fueron jugadoras internacionales. Se trataba de Elisabeth Cebrián, Marina Ferragut, Carlota Castrejana, Yolanda Moliné, Mar Xantal, Carolina de la Calzada e Izaskun Oteo. Betty Cebrián y Marina Ferragut cuentan con más de 250 partidos como internacionales, defendiendo los colores de la selección española.

Hoy son 14 las jugadoras que forman parte de la Selección Española de Baloncesto. Con 13 medallas (3 de ellas de oro), España es la potencia europea indiscutible del baloncesto femenino en este siglo XXI, y como tal, acudirá este verano de 2023 al Eurobasket, en cuya primera fase se medirá a Letonia, Montenegro y Grecia.

De las 13 medallas conquistadas por la SEAF desde 2001, 9 corresponden a Eurobasket, 3 a Copas del Mundo y una a Juegos Olímpicos. Sólo Rusia iguala a España con al menos una medalla en cada uno de los tres grandes campeonatos internacionales, otro dato relevante del máximo nivel de España.

Las catorce jugadoras proceden de las diferentes comunidades autónomas de España, dando ejemplo a todas las atletas que se esfuerzan en este querido deporte del baloncesto, desde las categorías más pequeñas hasta el máximo nivel. Son muchas las jugadoras que tienen de referencia a las grandes deportistas representantes españolas, que inspiran en cada campeonato y competición. Mucha suerte en el Eurobasket 2023, lo seguiremos bien de cerca.