Carlos Peña Sánchez / Agente de Helvetia Seguros
Una casa sola, sin sus dueños, en verano, es un caramelo muy apetecible para cualquier ladrón. Por eso, antes de marcharte de vacaciones, conviene que seas muy precavido y tomes todas las medidas que estén a tu alcance para evitar que tu vivienda se convierta en el objetivo perfecto para los amigos de lo ajeno.
Lo más importante es que no dejes señales evidentes de que no hay nadie en la casa. El buzón de correos lleno sin recoger durante días, el césped descuidado, las luces apagadas o las ventanas completamente cerradas pueden poner en alerta a los ladrones de que la vivienda está sola.
En estos casos, lo ideal es dejar la llave de la vivienda a un familiar o amigo para que cada día vaya a echar un vistazo, abra las persianas, encienda las luces un rato y recoja el correo. Si esto no es posible, siempre puedes comprar algún temporizador de luces para que se enciendan de vez en cuando y encargarle a algún vecino de confianza que recoja tu correspondencia. Así podrán creer que hay gente en la casa.
En cualquier caso, cuando te vayas, no cierres completamente las persianas, déjalas a media altura, pues esto es una de las pistas más importantes que puede tener un ladrón para saber que no hay nadie en la vivienda. Echa también las cortinas para que no se pueda ver desde fuera ningún objeto de valor.
Si tienes teléfono fijo, desvía las llamadas a tu móvil. Un teléfono que suena mucho y nunca se coge es un claro indicio para saber que no hay nadie en la casa.
Tampoco comentes tus movimientos en redes sociales. A veces los ladrones están más cerca de nosotros de lo que creemos, y entre los numerosos seguidores y contactos que tenemos, puede estar alguno de ellos. Así que ten cuidado con todo lo que pones en las redes sociales, tanto antes de marcharte como durante las vacaciones, pues una simple foto o un comentario puede aportar demasiada información. Lo mejor es que subas las fotos del viaje cuando estés de regreso. Si tienes hijos, presta mucha atención a lo que publican en ellas.
Un truco que también realiza alguna gente y suele funcionar es dejar la ropa tendida durante un par de días para que parezca que hay gente en la casa. Esto se recomienda sólo cuando se trate de viajes cortos, pues si la ropa se queda tendida durante muchos días, puede provocar el efecto contrario.
Además, conviene que cuentes con dispositivos de seguridad como alarmas que avisan directamente a la policía si alguien irrumpe en la vivienda, cámaras de seguridad, puertas con doble cerradura y ventanas protegidas con barrotes o rejas.
Esperamos que con estos consejos disfrutes de tus vacaciones sin preocupaciones y cuando vuelvas a casa te encuentres todo tal y como lo has dejado.
