Pastrana Chapa y Pintura abrió sus puertas al público en 2017 tras un proceso de transición personal y profesional que empezó en 2016. Desde entonces, este taller de chapa y pintura ha dado servicio a cientos de vehículos, primero en Membrilla y desde hace casi tres años en su actual ubicación en Manzanares, justo enfrente a la ITV. Al frente está Fernando, profesional con más de tres décadas de experiencia en el sector, que decidió emprender para trabajar con su propia filosofía y forma de entender el oficio.
Entrevista con Fernando Alfonso Gómez-Pastrana, Gerente
Pregunta.- ¿Cómo y cuándo nace Pastrana Chapa y Pintura?
Respuesta.- El taller abrió al público en 2017, pero todo empezó un año antes, en 2016. Yo llevaba 28 años trabajando en otra empresa, pero al cambiar la dirección de esta la cosa se torció. Me empezaron a asignar tareas que no eran de mi especialidad, vi que aquello no iba bien y decidí marcharme. Tuve que trabajar tres meses en otro taller para poder cobrar el paro íntegro y así reunir el dinero para montar el mío propio.
P.- ¿Qué te motivó a tomar esa decisión y emprender por tu cuenta?
R.- Sobre todo el querer seguir haciendo lo que me gusta, pero a mi manera. En el otro taller ya no me sentía cómodo ni valorado. Yo sabía que podía ofrecer un buen servicio y tenía mis propias ideas para organizar un taller, así que aposté por mí mismo. Me fui con las manos vacías, sin que me firmaran nada, pero sabía lo que quería.
P.- ¿Dónde está ubicado Pastrana Chapa y Pintura?
R.- Estamos en el Polígono Industrial de Manzanares en la calle Asturias 177, justo enfrente de la ITV.
P.- ¿Anteriormente estuvisteis en Membrilla verdad?
R.- Sí, allí estuve los primeros seis años. Fue un buen lugar para empezar porque el alquiler era más barato y los trámites fueron rápidos. En 2023 nos trasladamos a Manzanares para mejorar y ampliar el espacio.
P.- ¿Qué servicios ofrecéis en Pastrana Chapa y Pintura?
R.- Hacemos trabajos de carrocería como reparación y sustitución de chapa y pintura general de vehículos con técnicas actuales, tintado de lunas, pulido y renovación de faros, abrillantado general, etc. Contamos con una maquinaria moderna con bancadas, cabina de pintura, secado por infrarrojos con control de temperatura, máquina de diagnosis de vehículos… todo ello para reducir tiempos y mejorar resultados. Mecánica no hacemos, pero trabajamos con talleres de confianza para eso.
P.- ¿Tocáis también vehículos industriales?
R.- He tocado vehículos industriales y estoy muy acostumbrado a trabajar con ellos, pero al ser vehículos que no pueden estar parados mucho tiempo, solo los cogemos si sabemos que podemos cumplir los plazos. Si no, preferimos no asumirlo.
P.- ¿Qué tipo de clientes tenéis principalmente?
R.- La gran mayoría vienen por compañías de seguros. Casi el 100% de los trabajos que hacemos son por golpes cubiertos por pólizas. Luego hay algunos casos de gente que viene por capricho, para cambiar el color o hacer algo especial, pero son los menos.
P.- ¿De qué zonas proceden vuestros clientes?
R.- La mayoría son de Membrilla, donde abrí el taller originalmente y formé una clientela muy fiel. Pero por supuesto también de Manzanares y algún que otro cliente de localidades como La Solana, Alhambra, Moral de Calatrava, Daimiel o Bolaños de Calatrava.
P.- ¿Qué objetivos te marcas a diario para seguir adelante?
R.- Cumplir con nuestro propósito de dejar impecables y entregar los vehículos lo antes posible para que nuestros clientes queden satisfechos. Hoy en día la gente lo quiere todo para “ayer”, y eso nos obliga a ir muy rápido. Pero a la vez no queremos perder calidad. También hay un problema general: no hay mano de obra. Faltan profesionales en todos los oficios, y nosotros no somos la excepción. Así que nos toca aguantar con lo que tenemos e ir sacando el trabajo lo mejor posible.
P.- ¿Algún mensaje final que te gustaría compartir?
R.- Simplemente agradecer a los clientes que han confiado en mí desde el primer día. Seguimos aquí gracias a ellos, y mi compromiso es seguir dando un servicio honesto, profesional y cercano, como hasta ahora.
Texto y foto: Ayer&hoy