Carlos Caballero / Arqueólogo Colegio de Profesionales de la Arqueología

En las estribaciones de la Sierra de Guadarrama, la población de Valdemorillo guarda dos edficios singulares: uno, el robusto templo de la Asunción de Nuestra Señora; el otro, el testimonio de una industria local del siglo XIX, la Fábrica de Lozas. Si les apetece acompañarnos, en un pequeño recorrido por el casco urbano podremos hoy visitar y conocer mejor los dos.

La iglesia, de aspecto contundente, cuenta con una cabecera de origen románico, probablemente construida en torno a lo que fue una torre–fortaleza que ejercía de vigía sobre el camino de El Escorial, que se encuentra a pocos kilómetros de aquí. Todavía la torre conserva algunas aspilleras, varias de ellas ciegas, que nos hablan de un pasado anterior a su vocación religiosa, y ha habido incluso quien ha buscado en este origen remoto una legendaria vinculación con los caballeros templarios.

La parte principal del templo es indudablemente tardogótica, como revelan las ventanas geminadas, con ajimeces, la bóveda interior y, especialmente, la cornisa que, decorada con las mismas bolas graníticas que podemos ver en el castillo de Manzanares el Real, recorre toda la zona del templo construida en este momento.

En la imagen de la izquierda, la única torre rematada; a la derecha, interior del templo (Fotos: Wikipedia y Carlos Caballero)

A los pies encontramos el elemento más sobresaliente de este sólido edificio: dos torres (una de ellas, sin campanario) y una fachada en el más puro estilo herreriano, tan puro, que no han faltado investigadores que hayan atribuido el diseño de esta parte de la iglesia al propio Juan de Herrera que, por entonces, andaba peleándose con las piedras para poder construir el Monasterio de El Escorial. Es más probable, sin embargo, que la construcción sea obra de uno de los más fieles seguidores de ese estilo, Bartolomé de Elorriaga.

Si salimos de la iglesia por la puerta actual, que da a una plaza construida tras la guerra civil, veremos, a nuestra izquierda, lo que parecen tres chimeneas con forma de botella (aunque, en realidad, son la techumbre de tres hornos) que se alzan airosas sobre el casco urbano. Son el último testigo de la Fábrica de Porcelana y Loza Fina de Valdemorillo, que funcionó entre 1845 y 1915, sustituyó a otra de vida más corta que se había instalado en Galapagar, y compitió con otras lozas españolas muy famosas, como La Amistad (Cartagena), San Claudio (Oviedo), Pickman-La Cartuja (Sevilla) y Sargadelos (Lugo), algunas de las cuales aún siguen produciendo en nuestros días. Después de su clausura como fábrica de loza, el edificio aún revivió, hasta la guerra civil, como fábrica de productos para la industria eléctrica (aisladores para cables, entre otros) y pírex, un vidrio resistente al fuego.

Izq.. Estado actual de la fábrica de lozas; al fondo la iglesia. Centro: Una de las típicas producciones de loza de Valdemorillo (Fotos: Wikipedia y C.Caballero). Dcha.: Portada de la iglesia.

La fábrica de Valdemorillo fue una fundación de un industrial llamado Juan Falcó, uno de esos precursores de los que ya hemos hablado en esta sección en otras ocasiones (como Goyeneche en Nuevo Baztán o Cabarrús en la Vega del Jarama), pero la factoría se convertirá pronto en una industria innovadora que daría vida al pueblo y a cuyo amparo irían surgiendo pequeños talleres familiares, cariñosamente conocidos como “fabriquines”, que hicieron de Valdemorillo un centro productivo especializado en la elaboración de lozas.

En la actualidad, la antigua fábrica de lozas se ha rehabilitado para servir de centro cultural de Valdemorillo, mientras que muchas de sus producciones se conservan en museos y pueden también verse con regularidad en los catálogos de las subastas, manteniendo así vivo el recuerdo de una de las primeras industrias madrileñas.

(Quienes quieran saber más sobre la historia de la fábrica de lozas de Valdemorillo, pueden descargar el libro de José Sierra e Isabel Tuda que está disponible en la web de la Comunidad de Madrid: http://www.madrid.org/bvirtual/BVCM000645.pdf).