Citar el hotel Condestable no es simplemente hacer referencia de un establecimiento hotelero más en nuestra ciudad. Es un icono de la la capital, testigo del paso del tiempo entre los viandantes, sus paredes (si hablaran) bien podrían contar los entresijos sociales, culturales y económicos del último medio siglo que han tenido lugar en la provincia.

Flanqueado por el museo provincial y plaza de las batallas, el negocio de ha sabido adaptar, perfectamente, a los tiempos actuales, sin perder un ápice de su esencia.

Conozcamos la historia de uno de los hoteles más significativos de nuestra tierra, intergeneracional, totalmente renovado, que debe su nombre la historia.

Algunas fotos de las instalaciones del hotel Condestable: bar-cafetería, antigua piscina del hotel y gran terraza superior con magníficas vistas.

El hotel Condestable Iranzo no es sólo un nombre más en el panorama hotelero de la provincia de Jaén, nada más lejos de la realidad; su radio de acción, al margen de aparecer en las distintas guías de viaje como lugar predilecto en su sector, va más allá. Ha sido, es y será uno de los lugares de encuentro de los locales, pues junto con la mítica esquina de “Pioneros”, el “Condestable” continúa siendo, sigiloso, el punto de “quedada” principal de la capital. No falla.

Los 100 escasos metros que lo separan del centro álgido de la ciudad y su excelente ubicación, en el paseo de la estación con la calle Baeza, tienen parte de culpa: pocos lugares están estratégicamente tan bien situados, por ello no creo que haya un sólo jienense que no conozca su ubicación ni sus instalaciones.

Al hilo de las dependencias, es de justicia destacar no sólo la variada oferta de la que dispone, sino la modernización continua de la misma: se ha adaptado perfectamente al paso del tiempo, actualizándose por igual que la ciudad; recuerdo, como si de ayer se tratara, la antigua cafetería, al bingo y a su mítica discoteca, en los 90. Hoy día, la nueva cafetería, moderna y abierta al paseo de la estación, es un lugar ideal donde hacer un alto en el camino para degustar un buen desayuno, bien lo saben nuestros paisanos, al igual que también se pueden disfrutar de unas vistas panorámicas, impresionantes, desde la terraza de la novena, cóctel en mano, donde divisar Jaén a vista de pájaro es una experiencia inigualable, máxime en el momento del ocaso. En definitiva, una renovación completa del concepto de negocio hotelero, que ha sabido, camaleónicamente, adaptarse a la modernidad.

Sobre estas líneas, actividades culturales en el Condestable: encuentros con el cine español (2011) y feria del disco y cd (2007)

Comodidad y descanso.- Los espacios del céntrico hotel transmiten tranquilidad; la cuidada decoración de los mismos, desde la iluminación del nuevo bar hasta los tonos crudos y tierra de las habitaciones y pasillos, invitan al viajero al descanso. Los elegantes textiles de sus habitaciones, bañados con la luz tenue, son grandes responsables de que sus clientes repitan; las ventanas dobles de las estancias ayudan, muy mucho, a relajarse, ya que podemos disfrutar de unas vistas al pleno centro de la capital, sin el ruido que implica estar en el centro neurálgico de la misma. Un acierto.
Por dar una vuelta de tuerca a su historia, daremos unos pequeños “flashes” de su nombre, y algunas curiosidades. Su denominación no puede ser “más de Jaén”, pues se la debe a Don Miguel Lucas de Iranzo, barón, conde y condestable y halconero mayor del reino de Castilla del siglo XV, que gobernaba tanto la ciudad de Jaén como los territorios cercanos en plenos tiempos renacentistas, sin dejar a un lado que su estancia en las tierras del Santo Rostro siempre fueron voluntarias. Siempre ligado a Jaén. Qué mejor nombre para bautizar un hotel.

Cambiando de tercio, vamos al Jaén contemporáneo, ya que sus 46 años de vigencia dan para mucho: testigo directo del cambio de los últimos coletazos de la dictadura a la democracia, por sus puertas han pasado desde la mítica manifestación de la Organización Mundial del Comercio (OMC) del aceite, en el 98, hasta las últimas protestas de la plataforma “Jaén merece más”. En sus habitaciones han dormido desde primeros espadas del toreo, cineastas, literatos, políticos… hasta los visitantes que se deleitan con el turismo de interior, todos ellos escogiendo este mítico hotel por ubicación, calidad y servicios (piscina, parking privado, oferta gastronómica), de sobra conocidos.

Izq.: Panorámica de la plaza de las Batallas antes de las obras del tranvía, el hotel al fondo a la derecha. Centro: Fachada del hotel (Foto: Wikipedia). Dcha.: El Condestable, lugar predilecto de Jaén en muchas guías de viaje.

Otro de los bastiones que no pueden dejarse de citar en el hotel son tanto los eventos clásicos de la ciudad en materia cultural (Foro Jaén de opinión y debate, feria del disco, etc.), donde la diversidad intergeneracional siempre se da cita.

Sin olvidar que sienta precedente como lugar de encuentro para negocios, charlas políticas, refrigerios a media tarde, constatando, sin ninguna duda, que nuestro querido “Condestable” seguirá siendo, como siempre, un lugar preferente para los jiennenses, tal y como viene siendo desde el año 1975. De la combustión a los híbridos, de la transición a la actualidad, siempre esperarán al cliente, por muchos años, con una palabra amable y una sonrisa.

Texto: Manuel Miró Fotos: M. Miró, Hotel Condestable Iranzo