Cuarenta años dedicados al sector hostelero en La Solana

Jacinto Carrillo Jareño, promotor de la idea de montar este establecimiento, se fue a Zaragoza a trabajar con apenas 15 años a un restaurante. Allí, y en apenas un año, comenzó a aprender el oficio de hostelero, algo que le marcaría y le haría dedicarse al mundo hostelero durante todos estos años.

Al año siguiente, con 16 años, volvió con una idea clara, montar un restaurante en la población junto a sus padres, Juan Tomás Carrillo y Jacinta Jareño, que estarían en el negocio hasta el día de su jubilación, y su hermano Alfonso, que comenzó siendo apenas un niño a trabajar y que posteriormente, en el año 1995, se dedicaría a la agricultura.

Su padre, herrero de profesión, invirtió en un terreno comprando 400 m2 situado en la carretera antigua de La Solana-Manzanares (actual Avenida de la Constitución) para montar el restaurante. Unos años antes, Juan Tomás ya vendía alguna que otra cerveza en un solar que tenía con una piscina, viendo que aquello dejaba dinero, fue dejando a un lado su profesión de herrero.

La familia Carrillo-Jareño dentro de la barra del restaurante en sus inicios en los 80.

Fue en el año 1982 cuando nacería Restaurante El Quijote, un establecimiento hostelero con un pequeño comedor para 40 comensales donde daban servicio de comidas y en una zona que, por aquellos tiempos, poco tenía a su alrededor, prácticamente todo era campo. A los dos años, en 1984, deciden invertir en el negocio para ampliarlo, comprando otros 400 m2 más para agrandar el restaurante, pasando de 40 a 250 comensales, y montando un hostal para dar servicio de alojamiento a sus clientes, animados también por un primo suyo que tenía un hostal en Valencia, pasando a denominarse Hostal-Restaurante El Quijote.

Con el nuevo establecimiento creado, pronto comienzan a realizar diferentes tipos de eventos como bodas, comuniones o bautizos, llegando a dar cinco bodas en tres días. Como anécdota, en una de esas primeras bodas, y al ser primerizos en esos acontecimientos, la sopa que tenían preparada para dar a los comensales se fermentó y tuvieron que tirarla, improvisando y sustituyendo el plato por otros alimentos, por suerte todo quedó en un susto y la boda se celebró sin ningún problema.

Si por algo se ha caracterizado siempre este establecimiento ha sido por su comida casera, algo que aún mantienen pasando de padres a hijos. Pisto manchego, potaje de garbanzos con bacalao, fabada asturiana, estofado de cordero, cordero asado, paletilla, cochinillo…delicias de ayer, hoy y siempre.

Por el Hostal-Restaurante el Quijote han pasado personalidades de todo tipo, multitud de toreros o artistas como el Juli, el Cordobés, Ana Belén y Víctor Manuel, Sara Montiel, Luis Cobos, el Fary o el mismísimo Rey Juan Carlos I. Fue en los años 1990 cuando, su majestad, Juan Carlos I, hacía parada en este establecimiento ante la mirada atónita de todos los presentes. Estuvo unos 45 minutos, tiempo en el que tomó un descafeinado con leche y una magdalena e invitó a todos los presentes que se encontraban en el establecimiento. Pronto, tras enterarse los diferentes medios de comunicación locales y provinciales, llamaron a Jacinto para preguntar por lo que había hecho o tomado en el establecimiento. Sin duda, algo anecdótico que llamó mucho la atención a la población solanera.

Izq: Juan Tomás Carrillo junto a Luis Cobos y Sara Montiel en el restaurante. Dcha: Jacinto y Ramona (derecha) comiendo junto al equipo de empleados en los años 90.

Hostal-Restaurante El Quijote también ha sido, y es, un sitio de referencia para las personas que vienen en época de caza a la zona, hospedándose muchos de ellos en su hostal, viniendo de diferentes puntos de España como Murcia, Alicante, Valencia o Madrid. También durante muchos años, antes de realizar la variante, era sitio de referencia de camioneros y turistas que pasaban por la zona para alojarse, desayunar, comer o cenar. Aun así, muchos son los que siguen viniendo y repitiendo aun sin ser zona de carretera como antes.

Llegada la época del 2000, sobre todo en estos últimos 2 años, deciden reformar y acondicionar el establecimiento a los nuevos tiempos con una terraza bioclimatizada y dándole un cambio a su salón, contando en la actualidad con un comedor privado para 25 comensales, un comedor amplio para 170 comensales, la terraza cubierta para 70 comensales y el servicio de bar para otros 40 comensales. También comienzan a introducir nuevos platos a su ya gastronomía tradicional, sobre todo para enfocarlo a un público más joven, añadiendo a su carta diferentes tipos de hamburguesas, sándwiches, raciones, bocadillos, etc.

En la actualidad, el matrimonio formado por Jacinto y Ramona sigue al pie del cañón, trabajando juntos como lo han venido haciendo hasta ahora durante estos 20 años y con la incorporación de sus cuatro hijos que continúan con la misma fuerza e ilusión que siempre.

Izq: Jacinto y Ramona junto a sus hijos y empleados en la actualidad. Dcha: salón preparado para la celebración de una boda en los años 80.

Textos: Ayer&hoy

Fotos: Restaurante El Quijote