El Servicio de Oftalmología de la Gerencia de Atención Integrada de Alcázar de San Juan, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ha completado recientemente las 12.000 inyecciones intraoculares desde que en mayo del 2018 el Gobierno de Castilla-La Mancha dotara al Hospital General Mancha Centro de una sala para administrar este tipo de tratamientos.

En la Unidad Quirúrgica para inyecciones intraoculares del Hospital Mancha Centro se atiende a más de 300 pacientes al mes, principalmente, aquellos con patología macular, la zona más noble de la retina y la responsable de la visión central directa. La mayoría de las enfermedades de la vista que se tratan en este dispositivo son crónicas. De media, cada uno de estos pacientes recibe entre seis y ocho inyecciones al año.

Este es el caso de la Degeneración Macular Asociada a la EDAD (DMA), una enfermedad que se calcula padecen más de un millón de personas en España y que constituye la primera causa de pérdida de visión en personas que han superado los 50 años.

No obstante, aunque la Degeneración Macular Asociada a la edad es la patología más atendida, los oftalmólogos del Hospital Mancha Centro utilizan las inyecciones intraoculares para tratar otras enfermedades de la mácula como son la membrana neovascular miópica, las trombosis venosas y el edema macular asociado a la retinopatía diabética, también con mucha prevalencia en toda España.

Cirugía ambulante

Pero en esta Unidad, tal y como explica el jefe del Servicio de Oftalmología de la Gerencia de Alcázar de San Juan, el doctor Fernando González del Valle, también se realizan otros procedimientos de cirugía ambulante para patología preferente, que no puede demorarse, “como cirugía menor de córnea, de retina, de párpados, de glaucoma o determinadas cirugías locales de urgencia”, en horario de mañana, de lunes a viernes, y, si es necesario, también los fines de semana.

Estas cirugías ambulatorias son intervenciones que se realizan en quirófano y que no requieren el ingreso del paciente ni antes ni después de la cirugía. Los cuidados que antes se realizaban en los centros sanitarios, desde hace más de cuatro años se llevan a cabo en el domicilio del paciente, una vez que el personal sanitario ha valorado que existen las condiciones idóneas para el alta.

“Gracias a un gran equipo de profesionales hemos conseguido que nuestros pacientes vengan confiados a recibir sus tratamientos oculares. Los trabajadores de la unidad: Clemente Ramírez Montero, José María Olmedo, José Julián García Sirvent y María de la Guía Cambronero Martín atienden con gran dedicación y esmero a todos ellos, alejando totalmente  los miedos atávicos que un pinchazo en el ojo pueda generar a cualquier persona”, explica el jefe del Servicio de Oftalmología de la Gerencia de Alcázar de San Juan.

En opinión del doctor González del Valle, “todo esto se ha logrado gracias a una atención sanitaria de calidad y humanizada promovida por nuestro Sistema de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) desde un departamento específico y a un trabajo exhaustivo, ya que algunos pacientes pueden necesitar un tratamiento durante años, incluso de por vida, a veces en un solo ojo o, también en ocasiones, con medicación diferente para cada uno de sus ojos”. 

El hecho de que la patología macular sea muy prevalente, la necesidad de tratar uno o dos de los ojos de cada paciente, las revisiones personalizadas de cada enfermo, el seguimiento y la gestión más eficiente posible del gasto farmacéutico hace que sea necesario la colaboración estrecha con el Servicio de Oftalmología, de la Enfermería de Quirófano, del Servicio de Gestión y del Servicio de Farmacia Hospitalaria.