75 años dando brillo al nombre de Ciudad Real por el mundo.

Mazantini, grupo original de la Sección Femenina

Mazantini, grupo original de la Sección Femenina

Mazantini ha celebrado su 75 aniversario en este 2016 que acaba de pasar su última hoja del calendario. Un gran festival, que tuvo lugar el 19 de noviembre en el Teatro Quijano de Ciudad Real, puso el punto final a la efeméride. Pero, ¿qué es Mazantini?

Según nos cuenta su actual presidente, Rafael Romero Cárdenas, tenemos que remontarnos al año 1941 para encontrar el germen de lo que hoy es la «Asociación de Coros y Danzas Mazantini de Ciudad Real”, ya que fue entonces, y de la mano de la Sección Femenina de Falange, cuando nace un grupo en Ciudad Real destinado a recuperar el folclore de la provincia. Este hecho debemos encuadrarlo dentro del gran proyecto llevado a cabo por esta institución del Régimen en toda España. Y precisamente Ciudad Real fue una de las provincias que primero contó con dicho grupo. Y, por cierto, también el primero que salió en el NO-DO.

Al ser un proyecto de la parte femenina de la Falange era lógico que al principio sólo contase con mujeres. Su nombre exacto era “Sección de Coros y Danzas de la Sección Femenina”, algo que, años después, molestaba un poco a los hombres que ya se habían incorporado al grupo de baile. Como en sus inicios carecía de música propia, en sus actuaciones optaban por contratar rondallas ajenas. Dichas actuaciones se incluían en las visitas que  la Sección Femenina realizaba a las distintas localidades de la provincia con sus “Cátedras ambulantes”, que portaban una gran variedad de enseñanzas enfocadas a la mujer rural, entre ellas cocina, higiene, cuidado de los niños, y, por supuesto, el rescate de las tradiciones populares.

En aquellos momentos el repertorio de este grupo folclórico era muy escaso: La Jota de Ciudad Real, Fandango y unas Seguidillas. Al principio el grupo de baile lo componían seis parejas. Con el tiempo a este grupo se le unió la rondalla de Educación y Descanso (otra institución del Régimen, de carácter recreativo, dependiente de los sindicatos verticales) y, así equipados, comenzaron a hacer algún viaje por España. En estos desplazamientos, al coincidir con otros grupos, ven que éstos ya contaban con hombres, por lo que empiezan a incluirlos también en este de Ciudad Real. Pero con condiciones, claro. Así, en los viajes en el autobús, los hombres iban a un lado y las mujeres al otro, a la vez que los desplazamientos de noche estaban vetados. Por cierto que esto no debe interpretarse como algo propio de este grupo, sino que era una forma de ver las relaciones entre hombres y mujeres que se aplicaba en todas las situaciones sociales en aquella época. De hecho en las iglesias los hombres estaban en un lugar y las mujeres en otro. Y lo mismo en las piscinas.

A partir de los años 50 empiezan los viajes al extranjero, visitando, entre otros lugares, Bélgica, Marruecos, Francia o Italia, a la vez que el grupo se consolida y coge una gran fama a nivel nacional.

Y así llegamos al año 1964, cuando se celebra la Feria Mundial de Nueva York, la cual estuvo abierta desde el 22 de abril de 1964 al 17 de octubre de 1965, en la que España tiró la casa por la ventana y montó uno de los mejores pabellones de la muestra. Y allí debía estar el grupo de Ciudad Real junto con otros de distintas regiones españolas. Pero un hecho inesperado cambió radicalmente los planes. Los componentes del grupo se encontraban celebrando el próximo viaje a Estados Unidos en la Plaza del Pilar, donde entonces estaba “La Campana” con su terraza, lugar ocupado en la actualidad por el Banco de Santander, cuando un coche, que se salió de la calzada, les arrolló. Lógicamente el viaje tuvo que suspenderse pero se les prometió que en lugar de ir en este año 1964, lo harían al siguiente, en 1965. Sin embargo el accidente se había cobrado tres víctimas, los tres hombres, que quedaron imposibilitados para bailar. Este fue el momento en el que se le ofreció al actual director, Rafael Romero, que era un buen jugador de baloncesto, junto con otros cuatro compañeros del equipo, que se incorporasen al grupo y se preparasen para el viaje. Lo hicieron aprendiendo todo lo necesario en un tiempo record de seis meses y, fue precisamente en Nueva York, cuando bailaron por primera vez en su vida, ya que antes sólo lo habían hecho en ensayos. El viaje se hizo en avión y lo realizaron vestidos ya con los trajes tradicionales.

Mazantini en Nueva York en 1965

Mazantini en Nueva York en 1965

Y así, durante tres meses, este grupo fue parte de la imagen que España quiso dar al mundo desde esta feria internacional, lugar desde el que se desplazaron a numerosos lugares de los Estados Unidos, incluyendo también a la cercana Canadá.

A partir de ese momento el grupo sigue su trayectoria normal realizando numerosas actuaciones y viajes por diversos países hasta el año 1977, cuando desaparece la Sección Femenina, momento en el que el grupo se descompone, e intenta recomponerse a la vez, intentando rescatar del naufragio, al menos, los trajes. Es en estas fechas cuando se transforma en la Asociación Mazantini.

¿Y de dónde este nombre? ¿Quién era Mazantini?

Los componentes del grupo sabían muy bien quien era este personaje. Un daimieleño, Francisco Martín Consuegra, amante del folclore, con gran actividad durante los años 20y 30, y que posteriormente estuvo también en la Sección Femenina. Lo curioso es que se le apodaba “Mazantini”, sin saber muy bien si era por su parecido con un torero de la época del mismo nombre o por el de un tenor italiano, también con dicho nombre, que en 1911 actuó en una ópera italiana que se representó en el Parque Gasset.

De todas formas fue un cariñoso homenaje a un daimieleño que hizo mucho por el folclore de nuestra provincia. Y también, por qué negarlo, porque el nombre resultaba muy sonoro. La verdad es que ningún fundador de la actual asociación, (entre ellos Manuel Segura,
Luis Prado Fernández, Carlos de la Torre, Rafael Romero, Rosa Cano de Mateo, Adela Plaza, o Conchita Guijarro…,) llegó a conocer al tal Mazantini.

Poco a poco el grupo empieza a crecer, aumenta el número de socios, multiplican el vestuario y el repertorio, realizan cientos de actuaciones y llegan a su momento culmen en los años 90, sufriendo posteriormente una ligera decadencia, de la que se recuperaría ya a
partir del nuevo siglo. Es importante resaltar que en estos años, que este grupo soportó bastante bien, desaparecieron muchos otros grupos de la provincia.

Pero en esa época el mundo ya se les quedaba pequeño, puesto que viajan con un mínimo de 40 personas, entre parejas de baile (doce-catorce), músicos y cantantes, a China, Japón, México, por el norte de África, y prácticamente recorren toda Europa.

Otra de las características de Mazantini es que ha servido de modelo para otros grupos que terminan adoptando coreografías, repertorio e, incluso, trajes del grupo ciudarrealeño.

Mazantini en la Plaza de Tianamen, en Pekín

Mazantini en la Plaza de Tianamen, en Pekín

En la actualidad la asociación cuenta con una junta directiva formada por 12 personas, y áreas de baile, coro y rondalla, así como con una escuela en la que se forman, desde niños, los futuros bailarines, músicos o cantantes. Cada área tiene a la vez sus respectivos responsables. También se encuentra dentro de la asociación un grupo de investigación, otro formado sólo por mujeres cuyo objetivo es aprender bailes y folclore, pero sin objetivo de realizar actuaciones, así como un grupo de Mayores que sí participan en actos. Por edades, cuenta con un importante grupo de jóvenes alrededor de los 20 años, otro de personas maduras entre 40 y 50, que son los que llevan el peso del grupo, y finalmente los mayores que permanecen por afición. A ellos se deben sumar los cientos de niños que pasan por la escuela.

El grupo principal está formado en estos momentos por unas 60 personas y, como nota curiosa, podemos apuntar que, en contra de lo que ocurre en otros grupos, está equilibrado entre hombres y mujeres. Otra característica de este grupo principal es que no puede tener menores, ya que suele ser un inconveniente para los desplazamientos. Pese a todo, y dado que todos ellos son trabajadores o estudiantes,
muchas de las solicitudes que reciben para realizar actuaciones no pueden ser atendidas por falta de miembros disponibles, aunque también es verdad que en los viajes más importantes hay que seleccionar, pues suelen ser más las solicitudes que las necesidades.

Finalmente debemos señalar que dentro de su rico repertorio no se limitan a bailar varias piezas al azar, sino que las organizan de forma coherente en importantes espectáculos como puedan ser “La Mancha que inspiró a Cervantes”, “Homenaje a las seguidillas” o “Por tierra de España”. Este último incluye bailes de diversas regiones, pues Mazantini es el único grupo de España que baila piezas de todas las partes de España, motivo por el que viaja mucho a otros países, pues en un solo grupo está incluido el folclore de toda España.

Texto: Ayer&hoy
Fotos: Mazantini