Ceremonia de elección y nombramiento de los alcaldes para los estados hidalgo y pechero

Antonio García de Dionisio, alcalde pechero

Ante decenas de figurantes de la nobleza y el pueblo llano, la ceremonia de elección y nombramiento de los alcaldes para los estados hidalgo y pechero centró este domingo la actividad de las Jornadas Histórico-Turísticas ‘Manzanares medieval’ a las puertas del Castillo de Pilas Bonas. Con la presencia del alcaide, el comendador, el sargento de armas, el jefe de caballería, un escribano y un fraile, José María Ballesteros fue nombrado alcalde hidalgo y Antonio García de Dionisio alcalde pechero; mientras que José Ángel Horcajada y Eusebio Espinosa, regidores del Concejo.

Tras los actos litúrgicos con la celebración de una misa medieval en la que participó el coro Mansil Nahar, las reivindicaciones a favor del mantenimiento y la continuación de las Jornadas Histórico-Turísticas ‘Manzanares medieval’ marcaron el desarrollo del acto. Desde el primer momento, el representante de los alcaldes y regidores salientes, Pedro Martín-Buro, confesó su alegría al ver que “el pueblo reivindica como suyas las jornadas”, hecho que ha manifestado la gran participación vivida durante todo el fin de semana; y advirtió a los corporativos que no entiende de “politización” o “despolitización”, pero sí “de participación y de apoyo”.

Tras el sonido del olifante y el redoble de tambores, la elección de las nuevas autoridades medievales se hizo por el procedimiento tradicional determinado hace ya ocho siglos, por insaculación pública a través de la mano inocente de un niño. El heraldo, Juanjo Díaz-Portales, explicó que “los alcaldes medievales eran los encargados de mediar en los litigios vecinales entre el Estado noble y entre el pueblo llano”, y que al mismo tiempo eran los encargados de administrar la justicia civil en primera instancia y recaudar tributos primero para la Encomienda de Manzanares creada por la Orden de Calatrava y después para la villa de Manzanares.

Entre enseñas negras y rojas, el comendador -encarnado por Manuel Lorente- entregó  la vara de mando de la nobleza a José María Ballesteros, propuesto por la Asociación de Vecinos de Avenida del Parque, que aprovechó para pedir la continuación de las jornadas y la participación “de todos los ciudadanos”; y después a Antonio García de Dionisio, elegido por la Asociación de Vecinos de San Blas, la vara de mando del pueblo llano, que deleitó a los asistentes con un soneto sobre la “grandeza” de Manzanares y que culminó con un gran “hurra” por la ciudad. Por su parte, José Ángel Horcajada y Eusebio Espinosa, elegidos por la Asociación de Vecinos de Divina Pastora y del Nuevo Manzanares respectivamente, fueron designados como regidores del concejo medieval. Entre agradecimientos a las asociaciones de vecinos que los nombraron, los regidores también mostraron su deseo de perpetuar este evento que camina hacia su consolidación.

Tras el acto solemne, la comitiva de alcaldes y regidores, y el resto de autoridades medievales, realizaron un nuevo desfile desde la plaza de San Blas hasta el Parterre del Río para participar en la comida popular. De nuevo, el desfile contó con una alta representación de los diferentes grupos con sus estandartes, caballeros, soldados, tamborileros, arqueros, danzantes y demás personajes figurantes. Además, destacó la alta participación infantil, dada la celebración del concurso de indumentaria en la plaza de Santa Cruz.