Ha repasado las «malas conductas» más frecuentes y las medidas sancionadoras aparejadas, tanto penales, como civiles.

jueza-menoresLa jueza de Menores de Ciudad Real, Eva Saavedra, ha explicado a los alumnos de Segundo y Tercero de la ESO del Instituto de Enseñanza Secundaria Campo de Calatrava las consecuencias legales de los actos vandálicos, agresiones o robos que cada día trata en su labor profesional.

Lo ha hecho en una mañana intensa con cuatro charlas en las que han estado presentes, no solo los alumnos, sino también sus profesores como educadores y el concejal de Educación Francisco Navarro. Charlas propuestas por la comisión de absentismo que se ha creado en Miguelturra.

La ley dice que responsabilidad del menor se debe tratar de 14 a 18 años. Así, a los 14 años es cuando despuntamos de la infancia a la adolescencia y es el momento de informarles de las consecuencias que tienen», comentaba Saavedra.

La juez ha tocado temas inherentes a una parte problemática de la juventud y entre ellos explicaba como por ejemplo «los insultos en las redes sociales, las pintadas, las peleas y los hurtos o robos, derivan en medidas que pueden ir desde una amonestación hasta la privación de libertad en un centro de internamiento».

A esta medida le siguen en gravedad la obligación de tareas socio-educativas (los trabajos a la comunidad); el alejamiento que, en algunos casos, ha obligado a menores a ir al instituto de otro pueblo; la permanencia en centros de reforma los fines de semana y la más grave de todas; la inclusión permanente en dichos centros», ha dicho Eva Saavedra.

Además, la Jueza de Menores de Ciudad Real ha ampliado que «a ello se suma la responsabilidad civil, es decir, la compensación económica por el daño causado. Ha recalcado que siempre los actos tienen consecuencias y que si se hacen dentro de un centro educativo, perturbando su convivencia normal, hay una gravedad específica».

Tras la exposición, se abrió un turno de preguntas entre los chavales que se interesaron por las diferencias entre falta o delito, o por la forma de denunciar que han sufrido un robo «llevada a cabo de la forma más interactiva posible, pregunta-respuesta».

«Ley de menores no es blanda y la reeducación está impresa en la ley y el papel de los padres es muy importe, papel que alcanza de igual manera a abonar su responsabilidad, incluida la civil, relativa al comportamiento del menor a su cargo».

«Ciertamente, añadía la juez, no se dan los mismos casos en el centro que fuera, robos fuertes agresiones fuertes, casos agresiones, robo con fuerza etc… y en ese repaso, les ha informado que esas malas conductas pueden traducirse por ejemplo, en lo que se conoce como «libertad vigilada» y que consiste en que «aunque el menor sigue viviendo en su casa, el equipo técnico del juzgado impone unos horarios al menor para que no entre y salga cuando quiere de casa y le obliga a que vaya a clase y rinda en los estudios».

Por último, Eva Saavedra ha informado que los delitos más frecuentes que llegan a su juzgado son «los robos con fuerza o con intimidación seguidos muy de cerca por las agresiones, sean por peleas mutuas o por razones de venganza o por cuentas que los chicos tengan pendientes entre ellos. Ya en menor medida vendrían luego otro tipo de delitos».

Por su parte, el concejal de Educación Francisco Navarro que también estuvo presente en la charla de la juez ha reseñado que este es un tema que surgió en la comisión de absentismo. «Todos estuvimos de acuerdo en que sería magnífico que la jueza viniera a informar a los alumnos, a través de estas charlas muy instructivas, de que los actos vandálicos tienen consecuencias indeseadas». «Que quienes tienen que impartir a justicia, como en este caso la juez de menores, vengan a informar de cuáles pueden ser las consecuencias de sus acciones, es algo muy importante. Es una manera de incitar al joven a ser consecuente y reflexivos a la hora de actuar», ha añadido el edil.

Sin embargo, Navarro ha querido apuntar que «las conductas proclives al delito son muy raras en los centros educativos de Miguelturra suelen funcionar con la más absoluta normalidad. Los casos el delictivos son muy excepcionales, precisamente porque se cortan de raíz». «Incluso suelen ser los propios compañeros quienes procuran ayudar y solucionar».

«Los centros tienen buenos profesionales están bien organizados, y dentro de la comisión de la absentismo escolar estamos pendientes del cualquier caso que pueda haber, que nos planteen los centros y entonces en mínimos casos, si ha habido que elevarlos a la fiscalía de menores, siempre puede haber un caso excepcional, pero se queda en eso» puntualiza Navarro quien además añade que «realmente la educación es una tarea muy difícil, ya que hay que estar siempre encima de ellos, pero a la vez muy gratificante, normalmente los alumnos salen muy bien educados»

Por último el Educador Social del Centro, Juan Manuel Canaleja, ha añadido que «estas charlas están encaminadas pensando en los chicos y chicas de este centro educativo como una apuesta por una educación social en el instituto miguelturreño».

Se trata de que el alumnado desarrolle el tema del pensamiento consecuencial ya que hay cosas en la vida que no se pueden traspasar, entonces, por medio de estas charlas, con caso en los que ellos se vean se educa en la prevención».

«Los chicos tienen que estar preparados para enfrentarse a los conflictos y saber gestionarlos bien y tener una conciencia que les lleve a ser mejores personas el día de mañana, que tengan un futuro mejor. Ese es el objetivo», ha concluido Juan Manuel Canaleja.