LLa siega y la trilla, esos trabajos manuales fundamentales en las labores de campo hasta hace pocos años y ahora desaparecidos, se convirtieron en los protagonistas de una celebración para su recuerdo que tuvo lugar recientemente dentro de la Semana Cultural.
Hombres y mujeres carrioneros participaron en esta actividad siguiendo el mismo proceso y utilizando herramientas de sus antepasados, además de demostrar la buena forma física que tienen pese a su edad.
En la actividad también participaron los niños, que pudieron subir al trillo y comprobar en primera persona cómo se realizaba la separación del grano de la paja. A continuación los asistentes se trasladaron a Bodegas Naranjo, donde pudieron visitar una exposición de maquinaria, útiles y herramientas de finales del siglo XIX y principios del XX, relacionados con el proceso de elaboración del vino y el aceite.