Dicen los entendidos que en muchas disciplinas del deporte lo más complicado no es avanzar sino consolidarse. Son muchos los equipos que logran ascender de categoría y a la siguiente temporada regresan a la casilla de salida; en el tenis, por ejemplo, un break no tiene realmente valor hasta que después se ratifica con el saque. Con ese objetivo, la consolidación, el Manzanares FS Quesos El Hidalgo afrontaba su segunda experiencia en la categoría de plata del fútbol sala. Con esa meta y con la experiencia como aval para no volver a caer en errores del pasado. No ha sido una campaña fácil, pero al final el reto se ha conseguido y Manzanares volverá a pasear su nombre por todos los rincones del país en la Segunda División de la Liga Nacional de Fútbol Sala.

La junta directiva, presidida por Manuel del Salto, renovó a Carlos Sánchez Rozas como entrenador tras la brillante segunda vuelta y el play off de ascenso a Segunda División realizados. Y con él, a toda la plantilla que logró el ansiado ascenso: Pepote, Dani Juárez, Chin, Charly, Hurta, Chino, Kiki, Jorge Salcedo, Otero, Javi Liria y Juni. Las únicas incorporaciones en verano fueron las de Pepe, procedente del Gran Canaria de Primera División, y Edu, como tercer portero. Con estos mimbres y la inestimable colaboración del juvenil Jesús, que en dos años ha debutado tanto en Segunda B como Segunda, el Manzanares inició el campeonato liguero con una ajustada y polémica derrota en casa de ElPozo Ciudad de Murcia que, cosas del destino, se proclamaría campeón de liga en la última jornada gracias al empate logrado por los manchegos en la pista de Valdepeñas.

El comienzo no fue nada sencillo. El Manzanares alternaba victorias, a priori, complicadas, como en las pistas del filial del Barcelona (gracias a un gol de Jorge Salcedo en el último segundo) y del Elche, que venía de jugar el play off a Primera, con dolorosas derrotas en casa ante equipos como Lugo y Rivas. Antequera, Puertollano, Burela y Mengíbar también derrotaron a los manchegos, que lograron frenar la sangría con los tres puntos logrados ante el colista Tenerife. En ese momento de la temporada ya nadie tenía duda alguna de que habría que apretar los dientes y sufrir para mantener la categoría. Y los primeros en entenderlo fueron los aficionados, vitales para que el Manzanares lograra un punto de oro frente al Betis en casa, después de ir perdiendo 0-3. Desde esa jornada, la antepenúltima de la primera vuelta, el equipo de Carlos Sánchez ya no volvería a perder ningún partido en casa, a pesar de recibir a conjuntos de la talla de Valdepeñas, ElPozo Ciudad de Murcia, Barcelona B y Puertollano.

El Manzanares FS cerró la primera vuelta con un empate en el derbi contra Valdepeñas y fuera de los puestos de descenso, aunque a poca distancia. Hurta salió del equipo con destino a Silver Novanca, en busca de más minutos, y el club cerró los refuerzos de Pichón, que le dio otro aire al equipo y colaboró en la consecución del objetivo con sus goles, y el joven Alamancos, procedente de Torrejón. La segunda vuelta comenzó con un esperanzador empate con el filial de ElPozo en un espectacular encuentro en la ‘bombonera’ (5-5), pero una jornada después se produjo uno de los momentos más críticos de la temporada, cuando el Manzanares cayó derrotado por un humillante 10-1 en la pista de Córdoba, ante las miradas atónitas de más de un centenar de aficionados que se habían desplazado a la ciudad andaluza para apoyar al equipo.

La temporada continuó con una de cal y otra de arena: victoria fundamental en casa frente a Bisontes y derrota en Lugo, rival directo por la permanencia. El Manzanares FS Quesos El Hidalgo comenzó a ver la luz al final del túnel en las jornadas 20 y 21 en las que logró vencer a Barcelona B, de nuevo, y a Rivas a domicilio, sumando por primera vez dos victorias consecutivas. Después vendría un empate contra Elche, derrota frente a Antequera y otras dos victorias fundamentales y sufridas contra Puertollano (2-1) y Tenerife (3-4). La salvación matemática llegó en la jornada 28, a falta de tres partidos para el final del campeonato. El conjunto de Carlos Sánchez se impuso a Mengíbar en casa 3-2 (tras remontar un 0-2) y Noia salió goleado en la pista de Antequera. Los manzanareños pusieron la guinda al pastel logrando un empate en la pista del ascendido Valdepeñas en un choque vibrante y espectacular que acabó en tablas (6-6) y que supuso el título de liga para el filial de ElPozo.

La junta directiva del Manzanares FS Quesos El Hidalgo trabaja ya en el proyecto de la temporada 2018-19. El objetivo es dar un paso más e intentar lograr la permanencia con mayor solvencia y, a partir de ese momento, luchar por una plaza del play off. El madrileño Rubén Barrios, procedente de Leganés, sustituirá a Carlos Sánchez en el banquillo, y tendrá a sus órdenes a Chin, Kiki, Otero y el juvenil Jesús, los primeros jugadores en renovar.