El Daimiel RCF empezó este lunes su pretemporada. Como es habitual, el primer entrenamiento estuvo precedido por una charla de unos 20 minutos donde Alberto García-Consuegra ‘Kapa’ trasladó a sus jugadores las premisas sobre las que quiere construir el equipo y la convivencia del vestuario. A partir de ahí, tomó el mando el preparador físico, José Carlos Díaz, cuyo trabajo será el protagonista en estas primeras sesiones del año.
En total, 24 jugadores se vistieron de corto, aunque ahora mismo la plantilla cuente con 15 fichas seguras, tras la incorporación este mismo lunes del delantero Kike Córdoba, canterano del Daimiel RCF que el año pasado jugó con el CD Ciudad Real en Tercera División. Entre los jugadores que han venido a probar se pudo ver a Javi Herraéz, procedente del Villarrubia, y a Miguel, del Manzanares, dos jugadores que pueden jugar de central y medio centro, las posiciones que quedarían por reforzar, según se apunta desde el club. Sobre este posibles refuerzos, Kapa comentaba que “todo el mundo es bienvenido, y si dan la nota y nos interesan tanto al cuerpo técnico como a la directiva, igual contamos ellos”.
Para empezar a ver el equipo y estilo que el entrenador daimieleño quiere implantar, Kapa pedía esperar hasta la semana previa al inicio de la Liga. “El 22 de agosto ya tendremos una idea bastante aproximada de lo que queremos”, un conjunto que, según sus palabras, tiene que “disfrutar en el campo y divertir a la afición”. En este sentido, el entrenador, que debuta en Preferente, cree que los resultados de las primeras jornadas van a ser muy importantes. “Es un grupo muy joven y si los resultados no acompañan, tendremos que tirar de mucha psicología con el grupo”, entendía. No obstante, Kapa se mostraba confiado en que esa presión no haga tanta mella ya que se parte sin la exigencia de un objetivo deportivo concreto.
Campaña socios
Mientras, el presidente, Javier Montemayor, compartía las mismas ganas que la habían trasmitido los futbolistas y esperaba que esta temporada se consiga enganchar de nuevo al aficionado. Para ello, Montemayor recordaba que la directiva ha puesto en marcha una campaña de socios donde se ha reducido el precio del abono general en un 25%. “Sabemos que la situación económica no es la mejor en muchas familias y por eso hemos hecho esta rebaja, incluso los 60 euros se podrán pagar en dos o tres veces”, añadía.
Además, el club ha lanzado otras tres modalidades más. Un carné para jubilados por 50 euros; otro para menores de 25 años por 30 euros; y otro más, con ese mismo precio, para ver únicamente los partidos del equipo femenino. El objetivo “como mínimo”, aseguraba Javier Montemayor, es “renovar los abonados del año pasado” y, a partir de ahí, atraer a esa afición que “ha dado la espalda al fútbol daimieleño” en los últimos años.
Por último, el presidente del Daimiel reseñaba que su antecesor, Leonardo García-Moreno, mantiene cerradas las instalaciones de la sede del club porque “cree que es la mejor opción para defender sus intereses”. Así las cosas, una vez sacado el material deportivo que se guardaba allí, se está hablando con el Ayuntamiento para encontrar alternativas a esta “incomodidad”, soluciones que pasarían por “acondicionar alguno de los almacenes” que el club ya utilizaba en el campo de El Carmen.
