El Club de Integración Deportiva Casa Murcia de Getafe nace en el año 1991 con el objetivo de ofrecer a personas con discapacidad  la posibilidad de practicar un deporte en silla de ruedas. En la actualidad cuenta con once deportistas, tres mujeres y ocho hombres que compiten a nivel nacional e internacional. Los objetivos que han perseguido durante estos veinticinco años han sido integrar a personas con discapacidad a llevar una vida normal tras sufrir un accidente o lesión y superarse día a día.

Integramos a personas con discapacidad y llevamos el nombre de Getafe por Europa”

Pregunta.- ¿Cuándo se creó el Club de BSR de Getafe?
Respuesta.- Se creó por un grupo de personas que querían dar la capacidad de realizar deporte a personas con discapacidad física, así nació en 1991 el Club de Integración Deportiva Getafe, al cabo de los años el club se encontró sin junta directiva, con seis jugadores y un entrenador, pero no había nadie para presidirlo, entonces pidieron ayuda para poder continuar. Y fue a partir del año 2003 cuando el presidente de la Casa Regional de Murcia en Getafe, Alfonso García Gambín, crea una junta directiva para presidirlo y evitar su desaparición. Es entonces cuando nace el Club de Integración Deportiva Casa Murcia Getafe, y lo que hemos intentado desde entonces es darle una buena gestión, asentar el baloncesto en silla de ruedas en Getafe y sobre todo la implicación total con el deporte adaptado y conseguir que a día de hoy sea uno de los equipos con un gran futuro dentro de la liga de BSR español.

P.- ¿Con qué objetivos nace el Club?
R.- Normalmente cuando es un Club de Integración Deportiva, lo que se busca es que gente con discapacidad pueda hacer un deporte que le gusta o al que está habituado antes de la lesión, entonces, nace con ese objetivo, no solamente para la gente de Getafe sino la gente de la zona sur de Madrid que pueda hacer baloncesto en silla de ruedas.

P.- ¿Qué objetivos persigue el BSR de Getafe en la actualidad?
R.- Tenemos dos objetivos, el primero es que ellos que son deportistas de élite se sientan como tal y que compitan al máximo nivel como lo están haciendo. Y otro, es que gente que tenga una discapacidad física se pueda incorporar poco a poco, pueda hacer deporte, pueda ver que a través del deporte hay otra vida y que es igual de normalizada que la que tenía antes de la lesión a causa de un accidente o enfermedad, y que son tan válidos y tan normales como cualquiera con independencia o no de estar en una silla de ruedas.

P.- ¿Cuántos deportistas integran el equipo? Hablemos de ellos, porque algunos compiten a nivel nacional y otros en competición profesional internacional.
R.- Tenemos once deportistas, tres chicas y ocho chicos, de los cuales tres son extranjeros, un inglés, un colombiano y un brasileño. El jugador inglés, Charles, está con la selección sub 22 inglesa, el brasileño Joao P. Marinho ha sido portador de la antorcha olímpica en Río, lo que pasa que tuvo una lesión y al final no estuvo entre los dos elegidos, y el colombiano José Leep también juega con la selección. De los nacionales tenemos a Manuel, Javier, Juan Carlos, Daniel y, por último, Pablo Cubo que está con la sub 22, y las tres chicas: Lucía, Esther y Genoveva que están con la selección femenina. Todos ellos compiten a nivel nacional e internacional.

P.- Mucho esfuerzo, sacrificio y superación lo que hay detrás de este equipo, ¿cómo preparan los entrenamientos?
R.- Entrenamos tres días a la semana, por la tarde dos horas, y por las mañanas cuatro días una hora y cuarto, que es voluntario para todos menos para los tres profesionales, que son los extranjeros y tienen que entrenar más. El entrenamiento no es muy distinto a lo que es el baloncesto a pie, empezamos con un calentamiento de unos 15 minutos, algo de pista completa en movimiento para acabar de entrar en calor que nos lleva otros 15 minutos, y dependiendo del día de la semana empezamos a preparar cosas del partido o cosas que independientemente del equipo con el que juguemos las tenemos introducidas dentro del sistema.

P.- ¿Cuál es su labor dentro del club, tanto de fisioterapeuta como de entrenador?
R.- Llevo seis años formando parte del cuerpo técnico como fisioterapeuta, yo jugaba al baloncesto a pie, y me ofrecieron conocer este deporte y me enganchó la idea. Antes de entrenar les atiendo cualquier lesión o dolencia, tendinitis, sobrecarga de hombros, sobre todo el tren superior. Y llevo de entrenador dos años, junto con la segunda entrenadora y preparadora física, María Menchen.

P.- ¿Qué logros han conseguido en estos 25 años de trayectoria?
R.- El más importante fue a finales de abril de 2016, que ganamos la Willi Brinkmann Cup, que es la tercera competición europea, es el primer título internacional que hemos conseguido. Hace cinco años disputamos una final europea, y a nivel nacional todavía no hemos ganado ningún título, hemos jugado dos finales de Copa del Rey, y fuimos subcampeones de Liga hace tres años. En la División de Honor española  tenemos como objetivo no descender, tenemos un equipo mucho más joven y con un proyecto de futuro, somos el equipo de primera división que tiene más chicas y el objetivo es no descender. Primer objetivo no quedarse últimos, y luego ir escalando posiciones y la verdad que la temporada va bastante bien.

P.- Al competir a nivel nacional tienen que desplazarse a cualquier sitio para disputar los partidos.
R.- Vamos donde haga falta; desde Galicia hasta Canarias, cogemos trenes, aviones, lo que haga falta para desplazarnos. Nos gusta salir pero nos encontramos todavía con que la gente no está preparada para la gente con discapacidad. Si vamos en avión tenemos que estar dos horas y media antes para embarcar porque somos los primeros, tenemos que facturar las sillas de juego y es complicado. Intentamos ir a hoteles adaptados pero todavía hay barreras arquitectónicas y desconocimiento.

P.- ¿Qué balance hace de este cuarto de siglo que han cumplido?
R.- El proyecto cuando nace es para integrar a discapacitados y la verdad es que el objetivo se ha cumplido, no solamente se han adaptado sino que llevamos el nombre de Getafe por toda Europa y la función social que hace el club al final se tiene que ver representada en las instituciones contando con el apoyo del Ayuntamiento y los patrocinadores, cada vez nos hemos dado más a conocer y tenemos más apoyo de cara a las empresas locales. Poco a poco vamos calando.

P.- ¿Quizás los jugadores del equipo sean un referente para las personas que tienen discapacidad y están en silla de ruedas, pueden ser el vivo reflejo de superación?
R.- Son el reflejo de superación dependiendo de la edad que tengan, una persona que acaba de sufrir un accidente y vea que puede tener una vida totalmente normal de deporte, familiar, que el mundo no se acaba ahí, pues la verdad siempre ayuda. La familia se implica porque es una forma de normalizar su vida, porqué por tener una discapacidad no voy a poder hacer un deporte, hay que tener un poco de suerte y encontrar clubes como el nuestro que ayudan a esa normalización. Por ejemplo, tenemos unas veinte sillas para los niños que vienen de las escuelas y no tener que comprar una silla de primeras, así prueba si les gusta o no el deporte, porque el material sí que es caro, en torno a unos 4.000 euros por cada silla de competición.

P.- Para terminar, si quiere animar y hacer un llamamiento a los getafenses para que se acerquen a animar al club en los partidos que juegan en casa.
R.- Animo a todo el mundo a que pueda venir, no solamente a la gente mayor, sino a los niños también. Al final no deja de ser una lección de vida y les va a sorprender, yo he jugado a pie y creo que es mucho más divertido el baloncesto en silla. El Pabellón de Baloncesto Polideportivo Municipal Juan de la Cierva de Getafe alberga una capacidad de unas quinientas personas, hay sitio para que todo el mundo que quiera venir, venga.

Texto y foto: Natalia Sánchez Martín-Albo